Cómo va la reforma pensional en Colombia

Luego de una enorme expectativa durante seis meses, el pasado 23 de abril la plenaria del Senado de la República aprobó en segundo debate la reforma pensional presentada por el gobierno del presidente Petro a través de la ministra de Trabajo Gloria Inés Ramírez. Se completan así dos de los cuatro debates que se requieren para la aprobación definitiva del proyecto.
En esencia, la reforma busca ofrecer respuestas a los problemas de sostenibilidad financiera, cobertura y equidad. La población envejece, la informalidad laboral crece y el déficit del sistema pensional es una preocupación constante. Ante esta realidad, el gobierno ha propuesto una reforma que busca abordar estas dificultades, modernizar el sistema y mejorar la situación de los pensionados en el país.

El punto de mayor controversia durante el debate en la plenaria fue el de la entrada en vigencia del proyecto. Se concluyó que éste se empezaría a implementar gradualmente a partir de julio de 2025, no en 2026 o 2027 como propusieron algunos parlamentarios.
El proyecto de ley no plantea cambios para las pensiones de sobrevivientes y por invalidez. La mayor transformación es el sistema de pilares, que pasan de tres a cuatro:

1. El solidario (renta básica a abuelos sin pensión y en pobreza extrema);
2. El semicontributivo (renta vitalicia a personas sin el número mínimo de semanas cotizadas);
3. El contributivo (dividido en Régimen de Prima Media para ingresos de 1 a 2,3 s/m y Ahorro Individual para ingresos de 2,3 a 25 s/m); y
4. El ahorro voluntario (opción de cotizar más para obtener una mejor pensión).
El propósito de esta medida es fortalecer el sistema público, donde actualmente hay apenas el 30 % de los ahorros de pensiones, mientras que el restante 70 % está en los fondos privados. De este modo, Colpensiones pasaría de captar 14 billones de pesos anuales a recibir 35 billones, en tanto que los privados disminuirían sus ingresos de 30 billones anuales a 9 billones; y el Estado no deberá ya realizar giros de varios billones del tesoro público para cubrir las mesadas.

El mismo día de la aprobación de la reforma, el presidente Gustavo Petro dijo que el proyecto de ley busca aumentar la cobertura (pasar del 26 % actual al 86 % de la población colombiana en edad de pensionarse) para que muchas más personas de la tercera edad obtengan una pensión. Además de ese propósito, se busca:

1.Promover la equidad en el acceso a la jubilación;
2. Hacer complementarios el régimen privado y el público;
3. Flexibilizar las modalidades pensionales, permitiendo opciones (pensión por vejez, anticipada, de sobrevivientes, entre otras);
4. Construir un Sistema Integral de Protección a la Vejez, administrado por Colpensiones;
5. Otorgar beneficios especiales a las mujeres;
6. Establecer una fuerte rectoría del sistema a través de un mecanismo de monitoreo permanente que permita evaluar los parámetros y recomendar periódicamente ajustes necesarios al gobierno y al Congreso;
7. Resolver el problema de los grandes subsidios a las altas pensiones en Colpensiones.

Sin duda que una de las propuestas más interesantes de la reforma pensional es el decidido apoyo que le confiere a la mujer, en especial a la mujer madre de familia. Se plantea disminuir 50 semanas de cotización a las mujeres por cada hijo, reconociendo de esta manera la labor de la mujer en el cuidado de los niños. Además, se amplía a 22 % la posibilidad de que las mujeres puedan pensionarse, y se les otorga un mayor subsidio (30 %) en caso de que no logren una pensión.

Jaime Dussán, actual presidente de Colpensiones, enfatizó en que el paquete de reformas que cursan trámite en el Congreso están articuladas entre sí, sobre todo la laboral, la pensional y la de salud, pues las tres “son pegadas una a la otra: la reforma laboral ayuda a la generación de empleo, y así la gente pagará la salud y tendrá la posibilidad de cotizar en Colpensiones”.

Por su parte, Marta Peralta, la coordinadora ponente, al término de la votación dijo: “Ha ganado la verdad, la verdad sobre la desinformación, pero nos vamos con la responsabilidad de que aquí a nadie se le va a quitar su pensión, de que los jóvenes por fin sí nos vamos a poder pensionar, pero sobre todo vamos a disminuir la brecha de pobreza extrema que hoy atraviesan esa población adulta mayor que hoy vive en la miseria, que hoy vive en la mendicidad”.

El futuro definitivo del proyecto de reforma dependerá ahora de lo que ocurra en la comisión séptima y en la plenaria de la Cámara de Representantes antes de que termine la actual legislatura. Es, pues, a los representantes a la Cámara a quienes les corresponde entregarle a Colombia la buena noticia de que por fin los adultos mayores del país podrán disfrutar de una vejez un poco más digna, lo que está muy acorde con las líneas programáticas del actual Gobierno del Cambio.

Santiago de Cali, Colombia,
Abril 29 de 2024.